Bombardeos sobre los Estados Unidos
Despegó la noche del 9 de Septiembre junto a su observador de vuelo y su espada samurai, la espada de sus antepasados, de más de 400 años y que siempre portaba en la batalla. Se adentró 80 kilómetros en territorio enemigo hasta los grandes bosques del parque nacional del monte Emily y dejó caer las 6 bombas de 75 Kg. que dispersaban al detonar 520 bolitas incendiarias en un área de 90 metros cuadrados.
Lo más curioso de esta historia fue que en 1962, el viejo piloto reconvertido en comerciante de metales, recibió una invitación para viajar a Brookings, la única localidad que se vio un poco afectada por sus bombas y donde fue tan gratamente recibido que para corresponder aquel gesto, regaló al pueblo de Brookings su bien más preciado, la espada samurai de sus antepasados.
El siguiente ataque aéreo se realizó en 1944 y en esta ocasión el medio utilizado fueron los "Fugo" o globos bomba. Estos eran unos globos construidos de papel y que se hinchaban con hidrógeno. Dependiendo de las condiciones meteorológicas, podían recorrer hasta 8.000 Kms. en tres días a una altitud de unos 9Km.
Estos ingenios, podían transportar una carga de hasta 900 Kg. y llevaban varios artefactos explosivos (incendiarios, fragmentación...) que por medio de un sensor conectado a un altímetro, se soltaban cuando descendían a cierta altura.
Nota: Consiguieron "capturar" uno de estos globos al vuelo. Un extremadamente hábil piloto americano de caza divisó uno y poco a poco, a base de "empujones" con su ala, logró hacer que llegara a tierra)
La intención era provocar el caos y el pánico entre la población y se llegaron a soltar hasta 9.000 de estos globos, aunque su efectividad fue mínima. Apenas llegaron a 500 los que se llegaron a observar o aterrizar y muy pocos explosionaron correctamente. Por desgracia si produjeron víctimas (las únicas en suelo americano durante la guerra). Fueron una mujer y cinco niños que estando de excursión, vieron un extraño objeto colgando de un árbol y quisieron bajarlo a base de tirar de él. El artefacto explotó.
Este suceso fue ferreamente censurado y la población no se enteró de lo sucedido. Principalmente no se quería alarmar a la población, pero también logró que los japonese desistieran de seguir lanzando globos ya que, ante la falta de noticias, pensaron que no estaban llegando.
Todavía hoy en día se siguen encontrando alguno de estos Fugos, el último fue encontrado en Alaska, en 1992.
(NOTA: En un principio los americanos no sabían desde donde les llegaban esos artefactos y llegaron a pesar que lo estaban haciendo los prisioneros japoneses que tenían en campos de prisioneros en la costa Este. Fueron los geólogos, quienes después de analizar la arena de los sacos que servían de lastre al globo, descubrieron su procedencia.
Aporte de Arc junto a este enlace .)
2 comentarios
Arc -
http://web.umr.edu/~rogersda/forensic_geology/Japenese%20vengenance%20bombs%20new.htm
Hispa -